Capítulo 17
1750palabras
2024-02-17 04:18
Finalmente estoy lista. Estoy en el exterior y tomo un taxi hasta la cafetería. A pesar de saber que probablemente su reacción será buena, no puedo evitar sentirme nerviosa. Voy a decirle algo importante y espero que vayamos bien juntas.
En la cafetería, soy la primera en llegar. Ella todavía no ha aparecido, así que espero en la mesa. Un amable trabajador se acerca para tomar mi orden, pero aún no estoy segura de lo que quiero. No tengo mucho apetito. Decido esperar a Rebeca.
Finalmente aparece, pareciendo un poco perdida. La miro desde lejos y solo quiero que me vea en algún momento. Ella busca a tientas y no me encuentra. Aunque parezca divertido, me levanto de la silla para hacerle señas y hacerle saber que estoy cerca. Ella me encuentra y es tan bonita. Parece feliz de verme, y me resulta sorprendente que su abdomen esté tan grande. Apenas tiene cuatro meses, así que me sorprendo un poco.

La abrazo y ella me devuelve el abrazo.
—Me alegra verte de nuevo.
—Hey, también me alegra verte. Pero ahora tengo curiosidad por saber si lo que estoy pensando es cierto o... —me dice, mirándome con curiosidad. Sé que se refiere a mi abdomen abultado, así que asiento con la cabeza para confirmar sus pensamientos.
Ella se cubre la boca, realmente sorprendida. No puede creer que esté embarazada. Es algo extraño para ella, especialmente porque ella también está embarazada.
—Wow, realmente no lo esperaba de tu parte. Pero me alegra mucho por ti, felicidades por eso —señala y sonríe.
Le sonrío y ella suspira. Finalmente nos sentamos y ella parece estar procesando todo. Sé que tendré que mencionar que Zared es el padre en algún momento. Seguro que se sorprenderá al enterarse de que su hermano es el padre de mi bebé. Si estuviera en su lugar, también me sorprendería, pero así son las cosas.

Eso es lo que está sucediendo y en algún momento la conversación aparecerá. Le diré exactamente eso, aunque pueda parecer difícil de creer. Sigo sintiendo ansiedad y nervios en el fondo.
—Entonces, ¿estás saliendo con alguien? —me pregunta. No sé cómo responder a eso. Ella parece querer saberlo todo. Sé que está pensando en mi embarazo.
—Bueno, no exactamente. Pero, ¿cómo has estado? Tu abdomen es enorme. Más de lo que imaginé, ¿te queda poco tiempo? —le pregunto y ella sonríe.
—No, todavía me quedan cuatro meses. Aunque es cierto que ha crecido mucho, no debería ser tan grande. Supongo que varía en cada caso. Lo más importante es que mi bebé está saludable y no tengo preocupaciones, me siento tranquila al saber eso.

—Me alegra por ti. Yo tampoco he tenido problemas con mi bebé, creo que todo está bien. ¿Pedimos algo para comer? Me apetece un croissant y un café latte, ¿te parece si pedimos para las dos?
—Me encanta, gracias. Pero traje dinero para pagar, después de todo, yo te invité. Quiero hacerte este favor, espero que no te opongas, porque es lo que quiero hacer por ti —dice con una mirada suplicante.
No puedo creer lo dulce que es. Se ve diferente desde la última vez. Está más animada y parece que las circunstancias han cambiado para ella.
—No es justo. No importa quién invitó, Rebeca. Pero si quieres pagar, adelante. Ya habrá una próxima vez en la que yo pague la cuenta —le aseguro y me regala una sonrisa contagiosa.
Puedo decir que ella y su hermana son polos opuestos, pero de alguna manera también son diferentes a Zared. Aún así, él también es una persona amable que se preocupa por los demás. Eso es algo bueno que debo destacar de su personalidad.
Llamo a la mesera para que tome nuestras órdenes. Es amable y nos atiende rápidamente. Ambas esperamos pacientemente. Aún estoy dudando si decirle la verdad en este momento. Estoy un poco nerviosa.
—Estaba pensando en nombres para mi bebé, y se me ocurrió Melanie, es un bonito nombre. ¿Qué opinas? Creo que sería una buena elección. Es algo que tengo en mente.
—¿Melanie? Es bonito, sin duda. Pero piénsalo bien, hay muchos nombres hermosos. No digo que no sea una buena opción, pero podrías cambiar de opinión más adelante. Yo todavía estoy pensando en un nombre. Además, aún no sé el sexo de mi bebé, así que tengo que esperar.
Ella va a decir algo, pero no dice nada, ya que aparece la mesera con las órdenes.
La comida está toda deliciosa.
Aunque últimamente todo ahora me parece rico. Devoro mucho de todo, al punto de quedar llena y satisfecha, que es lo más importante. Pero siempre debo ser muy cuidado, ya que me tomo en serio lo que me dijo el doctor de alimentarme saludable. Es la única manera de poder estar sana y encontrarme bien, así como mi bebé también.
Me doy cuenta de que Rebeca también parece disfrutar mucho su comida, no come siempre cosas así, probablemente sí, pero yo también se ve muy bien. Supongo que todo con ella está bien.
—Dios, puedo crear que nunca antes había entrado a esta cafetería. Está todo rico, te agradezco, eh.
—Bien, yo debo seguir una dieta enviada por el especialista pero cada cierto tiempo no tiene nada de malo romperla.
Entonces ella me mira.
—Pues sí, también me cuido de comer demasiados carbohidratos y grasas. Pero mi hermano me consiente, cuándo puede lleva pizza. No sabes lo bien que se siente, además, después si le tengo que echar la culpa a alguien lo señalaría sin dudar.
—Buena jugada. Supongo que lo merece —comento y creo qué ha llegado el momento de revelar la verdad.
Definitivamente todavía no estoy preparada para ser sincera con ella. Pero lo haré de todos modos. Tomo una bocanada de aire profunda, antes de conseguir las palabras y poder hilar esa oración que le diga todo directamente pero con tacto.
—Sí, es muy lindo. Se preocupa tanto por mí que me pregunto cómo es posible que antes de dejar todo atrás, no pensara en lo importante que soy para él. Pero ahora veo todo diferente manera y puedo darme cuenta de que no hay mejor vida que estar cerca de la familia, de las personas que te quieren mucho.
Y sigue comiendo. Hago lo mismo.
Pero aquí voy, a decir todo.
—Oye Rebeca, hay una cosa que quiero hablar contigo, no encuentro cómo comenzar a decirte y creo que ir al grano sería aún más confuso para ti, de forma que te voy a contar todo esto, desde el principio para que más o menos puedas entender la relación de los hechos —emito.
Ella arruga el entrecejo y parpadea confundida sobre mí. La entiendo. Habría sido mi reacción también. Así que no estoy ajena a entenderle. Sé cómo ella se está sintiendo en este momento.
—¿Se trata de una situación mala?
—Solo escucha. Zared y yo nos conocimos hace años atrás, de hecho puedo decirte que solo tenía la idea de trece años y por simple casualidad lo vi, fui todo un día muy raro porque me había llamado la atención un chico, su físico increíble me capturó por completo, recuerdo que se dio cuenta de que lo estaba observando y es así como me siguió, fue un momento divertido, ahora que lo recuerdo, pero en ese momento sentí vergüenza. Terminamos comiendo... ese día moría realmente de hambre y probé su comida favorita, camarones. Jamás se me olvidaría eso, porque desde ese día descubrí que soy alérgica a los camarones. El día extraño parecía comenzar apenas, cuando desperté estando en la habitación de un hospital. Fue todo muy raro. Y es así como una pulsera que aún conservo, terminó aquí —muestro mi muñeca.
—Oh... Aunado a todo lo increíble que me estás contando y que parece de película, la pulsera que llevas en tu muñeca... no me digas que te la regaló mi hermano porque eso es imposible.
—No, no estoy bromeando con ese asunto, de hecho me la regaló. ¿Por qué?
Ella parece ponerse tan blanca como un papel y bate la cabeza. Entonces me observa un poco. Y yo no sé qué decirle, además me falta continuar con la historia y finalmente darle una conclusión que la dejará más sorprendida de lo que está, pero lo que me tiene intrigada, es saber que su reacción se debe a la pulsera que tengo. ¿Es que es realmente demasiado importante ese accesorio? Porque no entiendo nada en absoluto.
—Vaya, es que de verdad no me lo esperaba y... En fin, al final creo que debería ser él quien... Olvídalo. No dije nada —susurra y no la comprendo. Ella misma se contradice.
—No he terminado de hablar. Lo que te quiero decir es que después de eso no lo volví a ver más nunca y tiempo después fue simplemente una casualidad encontrarme en el mismo lugar que él, de hecho estábamos en su piso, pero luego recordé todo y había ido a beber a un bar, cuando perdí mi empleo porque estaba trabajando en una boutique, pero por un problema perdí mi lugar allí. A lo que quiero llegar es que Zared y yo estuvimos juntos, y semanas después descubrí que estoy embarazada. No hace falta agregar más para intentar decirte lo que quiero expresar...
Ella deja de comer y se queda en silencio.
—yo todo este tiempo me estaba preguntando cuál es tu relación con mi hermano y ahora lo entiendo todo.
—No, no somos pareja. Lo ocurrido fue simplemente un desliz. Yo estaba ebria, no estaba completamente en mis cabales y cometí un error, pero sé que no debería llamarlo más así, no cuando todo tiene sentido con el bebé que tengo dentro de mí... Pero aún así, tenía que decirte lo que estaba pasando...
—Vaya. De verdad que el mundo es un pañuelo. ¿En serio voy a ser tía? Claramente no lo termino de procesar y necesito más tiempo para entender que esto en realidad está pasando, pero lo que importa es saber si mi hermano ya lo sabe o todavía no se lo dices porque no me ha comentado nada, eh —expresa y yo asiento.
—Lo hice hoy, justo antes de dar mi renuncia. Hablé con Zared y le comenté todo. Estará conmigo en todo este proceso, así que no debería de preocuparme por nada. Ha sido bueno al dejarme saber que quiere ser parte de todo, no sabes lo asustada que estaba al principio. Y tú... ¿Qué me dices, Rebeca? Sé que no te esperabas eso, pero...