Capítulo 13
739palabras
2022-07-15 13:54
Mary cruzó los brazos a la altura de su pecho, adoptando una pose orgullosa mientras coquetamente jugaba con su cabello. "Oye, ¿de quién te vas a vengar? Laurel, has ofendido al invitado más preciado de nuestro bar. ¡Por eso, el jefe te acaba de despedir!"
Laurel se quedó petrificada durante unos segundos y de repente algo le hizo clic en la mente. "¡Mary! ¿Todo esto lo hiciste tú a propósito anoche?"
La chica la miró con ojos seductores y dijo en tono arrogante: "¡No eres tan estúpida! Sin embargo, has ofendido al maestro Stewart. Incluso si descubres que fui yo quien te tendió una trampa, ¿qué? ¡Ja ja!"

Mary se rio tan fuerte mientras hablaba que ni siquiera podía ponerse recta.
Era la primera vez que Laurel veía a una mujer tan desvergonzada. Estaba tan enfadada que apretó los dientes con fuerza.
De repente, "¡Bang!" Una figura apareció frente a Laurel y en el rostro de Mary se le apareció la marca de una palma.
Los ojos de la chica se abrieron con incredulidad. "¿Cómo te atreves a pegarme? El tabú más grande de Charming Moon Bar es la discordia entre colegas. ¡Me aseguraré de que el jefe te despida esta vez! ¡Espera y verás!"
Martha se puso frente a la chica, con los puños cerrados. Intentaba aferrarse al último ápice de cortesía que le quedaba para evitar darle un puñetazo. "¡Con eso aprenderás la lección! ¡Veamos si aún te atreves a actuar así la próxima vez!"
A ella no le daba miedo que la despidieran. Si ese iba a ser el caso, ¡que así fuera!

"¡Estás loca, esto no va a acabar así!" Mary se apresuró a huir con miedo.
Mientras miraba la silueta enojada de la chica cuando se iba, Laurel dijo preocupada: "Martha, ¿crees se quejará al jefe?"
Una sensación de desasosiego brotó en el corazón de Martha. "Que haga lo que quiera. ¡No tengo ninguna intención de seguir trabajando aquí de todos modos! Ya veremos qué pasará de aquí en adelante. Te han acosado y ni siquiera te ayudarán a exigir la justicia que mereces. En cambio, te dieron la patada. ¿Tiene algún sentido que yo me quede en una empresa así? ¡Estoy harta!"
Llevó a Laurel hasta el pasillo mientras terminaba su discurso.

Estaba lleno de gente y hablaban todos a la vez. Docenas de personas expresaban lo que acababa de suceder.
"Esa Laurel es demasiado desvergonzada. Solo estará aquí durante unos días y ya quiere ascender a lo más alto.¡Estoy harta! ¿Acaso no sabe cuál es su sitio?"
"¡Cierto, eso se sabe por su apariencia inocente pero sensual!"
"Oh, no me importa que ella cave su propia tumba, pero que no nos arrastre a los demás".
Solo Dios sabía cuántas de esas mujeres intentaron conquistar a Gregary y cuántas de ellas fracasaron en el intento. Los celos impregnaban la habitación.
"¡Cállense!" exclamó Martha sobre sus tacones altos, ansiosa por defender a su amiga.
Sin embargo, Laurel tiró de ella hacia atrás. Cuando vio lo que ponía en el tablón de anuncios, le hirvió la sangre y sentía que toda esa rabia se le estaba subiendo directamente a la cabeza.
"¡Martha! ¡No hay necesidad de perder el tiempo discutiendo con ellos! ¡Me voy, me niego a seguir aquí!"
"Laurel, ¿a dónde vas? La ignoró mientras gritaba detrás de ella y bajaba las escaleras con los tacones.
Martha estaba preocupada por la impulsividad de Laurel, así que la persiguió hasta la puerta, pero ella ya había parado a un taxi. Rápidamente subió y cerró la puerta.
"¡Laurel! ¡Espera un minuto! ¡M*ldita sea!" Al mirar el automóvil en la distancia, la chica sacó su móvil e hizo una llamada telefónica. "¿Por qué despediste a Laurel? ¿No sabes que es mi mejor amiga? ¡Exijo justicia para ella!".
Una voz perezosa y magnética provenía del otro lado del móvil, acompañada de una respiración algo pesada. "¡No te preocupes! Gregary no le hará nada malo. ¡Ja! ¡Qué palomilla!"
Martha se quedó atónita durante un instante y luego se dio cuenta de lo que pensaba su interlocutor. Su rostro se puso rojo y rápidamente colgó el móvil. Estaba tan enojada que sintió ganas de romperlo.
Cuando Laurel pensó en los anuncios del tablón casi explotó de rabia.
¿Qué querían decir con que 'Laurel Kelly sedujo a Gregary Stewart'?
Incluso ponía que se disculpara con él. ¡Já!
¡Está bien! Si es lo que quiere, ¡me disculparé con él ahora mismo! Pensó.